martes, 25 de octubre de 2011

Los aires de mi paisito

Gloria Varela

Los aires del paisito Uruguay, despiertan en Gloria no sólo el gran recuerdo o añoranza sino le da fuerza para seguir luchando contra las injusticias en nuestra América morena así como en las calles escandinavas. Ella nos da a conocer francamente parte de esa lucha…..

Las discusiones de carácter ideológico- político eran una constante. Mi abuela, siguiendo a mis tíos, a principios del siglo pasado, en sus primeras asambleas, se intereso de lo político. Era autodidáctica. Recuerdo, que como dormía en la misma habitación con ella, lo primero que hacía, prendía la radio, no me olvidaré nunca porque me decía “a ver cuántos aviones B52 tiraron los vietnamitas abajo” se alegraba mucho. Era una mujer con un gran sentimiento de justicia. No hacia grandes comentarios, hablaba poco; pero no permitía ni toleraba ninguna crítica. Tenía principios muy claros. Cuando querían hablar por ejemplo si alguna mujer se había casado embarazado, ella cortaba el tema, y decía: en todos los tiempos pasaron cosas.

JHR: ¿Puedes narrar algo sobre tu infancia?
Mi infancia. Qué pregunta. (Una sonrisa apareció en los labios de Gloria). Fue un tanto complicada. La familia es de origen español. Fui criada por mi abuela, en una disciplina muy rígida. De todo se recoge, una experiencia, una forma de vivir y de ser. No fue una infancia feliz, no tuve ni infancia, ni juventud.

Soy de Montevideo, de lo que hoy se llama la zona UNO por su composición social; en aquel momento era una zona de gente humilde, cerca de la costa, a 200 metros de la playa Pocitos. Se dice que lo llamaron pocitos, por que corría un arroyo que terminaba en la costa, allí iban las lavanderas a lavar y para ello hacían pozos en su orilla.

JHR: ¿Qué recuerdos tienes del barrio?
Gloria: Una maravilla, primero que vivía muy cerca del mar, a dos cuadras, desde la azotea de la casa, cuando iba a tender la ropa, veía llegar las lanchas de los pescadores a la playa con el pescado fresco. Mi abuelo me solía llevar con él a comprarlo y mi abuela lo limpiaba, y era nuestro almuerzo, pescado frito.

Mi barrio, por supuesto que lo recuerdo, allí me casé, tuve mis hijos, allí trabajé políticamente muchísimos años. Si voy a hacer un balance, si de alguna manera fui feliz.

JHR: ¿Qué recuerdos tienes de tu juventud?
Gloria: Me casé muy joven, cumplí 18 años casada, y cuando una se casa tan joven, la juventud se fue. Una empieza una nueva etapa de la vida, la de mujer, con responsabilidades, casa, pareja, con tres hijos, mi juventud fue muy corta.

JHR: ¿Qué es lo que te interesó mucho más en esa época de recién casada, tener los hijos? ¿Cuál era tu ambición como madre y como mujer, en ese entonces?
Gloria: Bueno, la maternidad era, entonces un hecho natural y, yo diría obligatorio. Atender a su marido por supuesto. Trabajé como funcionaria en el SUNCA, el sindicato de los obreros de la construcción, pero cuando tuve a mis hijos mayores el ya no quiso que continuara trabajando.

Casada con un español, con sus principios mi deber era dedicarme a mi casa, a mis hijos, pero no pudo impedir que participara políticamente, en forma muy activa. Era un obrero gráfico muy calificado, entre los primeros lulistas de Montevideo. Trabajo, además de haber tenido negocio, en diarios importantes de Uruguay. En una cooperativa gráfica que imprimía la prensa del FA, pero sucesivas censuras, los llevaron a la quiebra. Hombre callado y reservado, me vine a enterar aquí, en Gotemburgo, cuando llego Olmos, dirigente del Sindicato Gráfico en Uruguay, de su afiliación sindical.

Tuvo aquí la gran responsabilidad de la imprenta que funcionaba en nuestro departamento en Hjällbo. Impresiones a mimeógrafo, de alta calidad, de importantes materiales teóricos, Arismendi. Enrique Rodríguez y otros, que se distribuyeron a nivel internacional. Conservo todavía esos ejemplares, otros los done a la Biblioteca aquí.

Con los años y tanto oírme predicar, llego una etapa en Uruguay en el 72-73, que si no salía el diario del partido, El Popular, le decía a su hijo: vaya hasta el quiosco y pregunte si ha salido el diario. Si no es así algo grave está pasando.
Yo me crié en una familia comunista, eran republicanos, había un tío anarquista otro socialista, en este entorno, era natural que despertara en mí, un gran interés político.
Los primeros carnets del partido, cofundadores de las primeras organizaciones sindicales, están en mi familia.

Las discusiones de carácter ideológico- político eran una constante. Mi abuela, siguiendo a mis tíos, a principios del siglo pasado, en sus primeras asambleas, se intereso de lo político. Era autodidáctica. Recuerdo, que como dormía en la misma habitación con ella, lo primero que hacía, prendía la radio, no me olvidaré nunca porque me decía “a ver cuántos aviones B52 tiraron los vietnamitas abajo” se alegraba mucho. Era una mujer con un gran sentimiento de justicia.

No hacia grandes comentarios, hablaba poco; pero no permitía ni toleraba ninguna crítica. Tenía principios muy claros. Cuando querían hablar por ejemplo si alguna mujer se había casado embarazado, ella cortaba el tema, y decía: en todos los tiempos pasaron cosas.
Me relató toda la historia de la familia.

Tuve un tío que fue muy importante en mi vida, vivía en la casa con mis abuelos. Mi abuelo murió antes que mi abuela, él, (mi tío) vivió con ella. Cuando él tenía 50 años y ella como 80, le dijo sabiendo que tenía una pareja: “que se iba a morir y que él debería establecerse, sino iba a quedar solo” y prácticamente lo echó de la casa. Mi tío Marcial, cuando volví ya había muerto, es todavía hoy, uno de mis recuerdos más dolorosos que no lo volví a ver con vida.

Por el comencé la escuela, me compró mis primeros libros, mis primeros lápices, mi primer libro filosófico; “Cómo el hombre se hizo Gigante” una serie de libros muy importantes de Illin-Segal , no tendría yo más de 14 años. Solidario, lo vi cuando la huelga de hambre de los productores paperos en Uruguay, donde murió Tomasich, cuando llegaron los cañeros a Montevideo, desprenderse de todo lo que tenía de valor para contribuir económicamente.

No quiero olvidar a mi dulce abuela gallega, quedo viuda joven. A mi abuelo, anarquista lo mataron en una huelga, en Uruguay. Eran cinco hijos, entre ellos mi padre, vendió verdura por las puertas, para mantenerlos y darles una educación. Con ella, me cantaba en gallego, aprendí a conocer a la gran Rosalía de Castro.
Gloria en una permanente discusión

JHR: ¿Cuándo y cómo te pronuncias como mujer?
Gloria: Ingresé, como primer acto consiente, después de casada en la Unión Femenina del Uruguay. Mujeres que trabajaban sobre todo con amas de casa, sin una formación política, sindical, por no trabajar. Reuniones pequeñas, abriendo conciencias. En eso que es la educación política, hoy tan necesaria.

En aquel momento no funcionaba la Juventud del Partido. Gómez, anterior secretario, había sido expulsado, entraba Arismendi. Fue un punto de inflexión. Gran teórico marco el desarrollo del Partido.

Un visionario. Su teoría de unidad de todos los sectores, la acumulación de fuerzas, que convirtieron al Partido en un elemento fundamental para concretizar la formación del Frente Amplio, conjuntamente con otros sectores.

Yo rescato esto porque me duele, sobre todo hoy, la usurpación y el ocultamiento del rol del Partido, en el desarrollo político de Uruguay, que fue… vital; no lo digo por sectaria, dogmática, lo digo porque fui parte de todo ese proceso y lo viví. Alcance a vender Justicia. Participe en la campaña financiera para la compra de la rotativa para El Popular. Yo salía con el diario, el bono y la afiliación al sindicato y al partido.

Hacia asambleas en las obras de la Rambla de Pocitos con los trabajadores de la construcción, solita, soy militante, y lo digo no sin orgullo, desde muy joven.

Fui comprendiendo cada vez más la importancia de nuestro rol en la sociedad, siempre milite en agitación, finanzas, esa era mi tarea.

JHR: ¿Cómo era la lucha con la oposición?
Gloria: Oposición en el Uruguay?.... (Sonrisas), La oposición real eran los partidos “llamados tradicionales” y nuestro planteo era romper el bipartidismo, y eso lo logramos con la formación del Frente Amplio. Una alternativa real de cambios.

El FA era la expresión unitaria del los más importantes partidos de la izquierda uruguaya y otras fuerzas progresistas desprendidas de los partidos tradicionales.

Pero, para no retrotraerme mucho, ya en el 71 hubo grandes movilizaciones, la marcha desde Artigas de los cañeros hacía Montevideo, muerte de estudiantes. En el 72 paro general, acciones del Movimiento Tupamaro que hicieron aún más compleja la situación, el asesinato de los 8 trabajadores en la seccional 20 del partido, la exigencia de la liberación de los presos políticos.
Discrepancias, sobre todo de metodología, con los Tupamaros.

La unidad, como te decía anteriormente de los trabajadores en una central única, el Congreso del Pueblo. Del movimiento estudiantil, los intelectuales, el arte y la cultura de mi país. Militares, como Seregni, demócratas. Era la primera vez, aparte del intento de Terra, que los militares daban un golpe de estado en mi país. Uruguay tenía la tradición democrática más larga y estable del continente.

Teníamos, y espero tenemos, además toda una larga trayectoria y experiencia en la Solidaridad con otros pueblos, La República de España, Vietnam, Cuba. Esa Cuba hasta hoy referencia y ejemplo. Chile, veníamos acompañando todo el proceso, muy paralelo al de Uruguay. Desde el “Tancaso”, ya nosotros con la dictadura encima, no olvidar que el golpe fue el 27 de junio, y en Chile el 11 setiembre, el asesinato de Víctor Jara, igual salimos a la calle en manifestaciones relámpago a denunciar lo sucedido.
En ese clima viví toda mi vida en Uruguay.

JHR: La lucha política antes de las dictaduras, ¿cómo se las encara?
Gloria: Ya estaba planteado, de que ante un golpe de estado, se respondería con la huelga general. Así fue. Es la resistencia más larga que se conocía hasta ese momento, el 30 de junio se ilegalizó la CNT (Central nacional de Trabajadores).

El 9 de julio marchamos las mujeres vestidas de negro a lo largo de la Avenida 18 de Julio hasta la Catedral en repudio al golpe, duramente reprimida, después de dos semanas se levanto la huelga y se paso a otra etapa. Huelga que tuvo gran apoyo de amplios sectores de la población.
La lucha clandestina, ya nos habían ellos cerrado las vías de respuesta “legales”.

En 1979 intentaron reglamentar los sindicatos pero fracasaron estrepitosamente. Los trabajadores tenían toda una experiencia detrás de lucha y unidad no olvidada.

JHR: Cómo se da el Golpe de Estada en Uruguay y sus consecuencias?
Gloria: Uruguay y demás países latinoamericanos firman en el 59, algo que marco el devenir histórico de nuestro continente. El Pacto de Estabilización del FMI, y así ya nos metieron en la política neoliberal. Toda la política interna y externa paso a definirla el FMI. Y nos convertimos en países dependientes y condicionados.

Por supuesto que esta política en la que hoy, en forma más brutal vive el planeta, ante la cual ya se levantan inclusive en las entrañas del monstruo, los pueblos del mundo, no paso desapercibida y sin una masiva y contundente respuesta. Cuestionaba como ya hoy a través del Tratado de Lisboa, nuestras propias constituciones. Nuestras soberanías. Esto es lo que ellos llaman “democracias” y nosotros decimos “tuteladas”

Democracia cuando como en Uruguay ayer, con la formación del FA se crearon los Comités del FA, con la amplia participación popular en sus asambleas, que llevaban después sus resoluciones a instancias más altas para ser discutidas en los Congresos del FA o del Partido. Eso es “democracia participativa”.

Pueblos con una rica experiencia de lucha, altamente politizados como Chile y Uruguay, la revolución cubana, ellos sabían que esto no se podía aplicar sin una fuerte resistencia popular. EE.UU ya tenía bastantes preocupaciones con Cuba, por lo tanto no perdía de vista los importantes procesos políticos de Chile y Uruguay o Bolivia. Sacudida una vez por mes al menos, por los golpes de estado, pero de todos modos era de los tres países con centrales únicas, la COB. ¿Qué métodos le queda al imperialismo, ante un proceso de masas imparable, que el golpe de estado y la represión?
Gloria V. conversando

JHR: ¿Cuales son las consecuencias de este Golpe Fascista, dentro de las organizaciones de base, de partido y la solidaridad latinoamericana, en el Uruguay?

Gloria: Por supuesto que estas dictaduras han dejado huellas profundas en nuestra historia actual, en el caso de Uruguay, la diáspora más grave del mundo, en relación a su población. 3 millones de habitantes, y se estima que un millón esta en el exterior. Faltan dos generaciones, por lo tanto es un país envejecido.

El Partido Comunista, y sobre todo después de la caída del Muro de Berlín, se ha dividido, y esto ha ocasionado a mi entender, una secuela grave, un debilitamiento ideológico en el pueblo en general.
Por razones más profundas, que requerirían otra entrevista, nos encontramos hoy ante una realidad muy dolorosa. La ignorancia política, pérdida de valores y principios fundamentales para la tolerancia, convivencia, que son el respeto a lo diferente, el sentimiento de solidaridad y empatía, ante una sociedad donde solo se repiten los valores que impone un sistema brutal, de competitividad, sin ver al prójimo. Donde una subcultura nos impone a través de videojuegos, programas clonados, los valores más primitivos del individuo.

La educación y la escuela son los pilares de la democracia real, por eso su ataque frontal global. Por eso mismo es tan importante la defensa de esa escuela laica. Hoy nos sacude y emociona el proceso chileno, con Camila Vallejo, de defensa de la educación. Ha puesto de cabeza a Piñera, y hasta lo han obligado a un plebiscito que ha sido aprobado por mayoría. Salud Chile.

JHR: A Uruguay siempre se la calificó como “La Suiza de América”: ¿Cómo se la veía interiormente?
Gloria: Uruguay tenía la cifra más baja de analfabetismo, esa escuela pública que yo tanto defiendo en todo caso , que fue principio fundamental de nuestra educación. Que seguramente marco nuestra conducta cívica. La toma de responsabilidad y posición en la sociedad.

Un alto grado de educación política además. Somos un país bastante europeizado. La “conquista” fue sin duda un proceso brutal de colonización. Hoy se vive a través de las grandes transnacionales, entre ellas españolas, otra etapa neocolonialista. Pero los españoles, como otras nacionalidades llegadas a Uruguay a principios del siglo pasado han marcado nuestro desarrollo.

Aquellos inmigrantes, fueron impulso para la creación de las primeras organizaciones políticas y sindicales. Cuando la dictadura franquista, importantes figuras de la cultura española llegaron a Uruguay buscando asilo, perseguidos por el franquismo: Margarita Xirgú, Federico García Lorca, Miguel de Molina, José Pepe Estruch y otros, fundaron por ej. La Escuela Municipal de Arte Dramático.

Otros grupos como los armeños llegados después del genocidio, franceses, italianos han enriquecido nuestra cultura, la inmigración enriquece.

África, aquellos que huían de la esclavitud en Brasil o llegaron como esclavos a Uruguay, nos han dejado como legado el candombe, ritmo representativo de nuestra cultura afro.. Suiza de América?, quizás porque en las décadas posteriores, después de la segunda guerra mundial, Uruguay fue un gran exportador, sobre todo de carne, cueros y lana, que permitió un desarrollo importante económico
Charrua.

JHR: Se da el golpe militar ¿Cómo reacciona el pueblo uruguayo?

Gloria: Hubo un movimiento de resistencia importante, pero lo más doloroso para mí, es que la grave situación política, económica y la falta de trabajo, nos obligo a dejar el país. Importantes sectores de la industria textil se fueron para Australia, parte de la Salud para Canadá. Una diáspora brutal.

JHR: Cuándo y cómo llegas tu a Suecia?
Gloria: Ya teníamos la dictadura encima, yo continuaba militando, por supuesto. Con un partido duramente reprimido. No totalmente ilegal, pero si con precaución. Con mis hijos, la perrita, salía a distribuir la Carta del partido, hacer finanzas. Pero años de militancia, estaba muy fichada, hicieron que me comenzaran a seguir. Un día una vecina me dice que si yo no me había dado cuenta de ello.

Tenía militares de alto rango en mi cuadra, y aquellos autos detenidos en mi acera, yo los atribuía a eso. Pero allanaron nuestra vivienda por tenencia de armas, denuncia de un vecino, me amenazaron pintando consignas amenazantes en el muro del jardincito, en la columna de la luz y finalmente en mi puerta. Ojo comunista JUP (Juventud Uruguay de Pie), ya no era broma. Organización conocida en Uruguay, tuve que abandonar mi país. Mi mayor preocupación ante una detención era mi hija, una preciosa adolescente de 13 años, que podían violar o torturar, y no resistir si me torturaban y delatar a mis compañeros. Una cosa es cacarear afuera y otra cosa es estar adentro.

Con gran angustia, cuando me plantearon que tenía que dejar el país, entendí que era la hora de irme. Pero no dejábamos de tener cierta inocencia y con desconocimiento de Argentina, la gravedad de lo que estaba pasando, nos fuimos con mi marido a Buenos Aires, con la esperanza de volver después de un año y el año se ha convertido en 35.

En Buenos Aires comprendimos los alcances de la operación Cóndor. El asesinato de Zelmar Michelini, Gutiérrez Ruiz, la desaparición del Dr. Liberoff.

JHR: ¿Cómo llegas a Gotemburgo?
Gloria: Llego porque en Buenos Aires también por supuesto nos alcanzó la represión. Después de muchos avatares en Buenos Aires tuvimos que refugiarnos. Allanaron fuerzas paramilitares el hotel en que vivíamos. Suceso que inclusive tuvo repercusión en Suecia, lo supimos después. A través de ACNUR llegamos aquí. Éramos 5 familias. A otra Suecia más humana y solidaria. No me refiero a su pueblo, sino a sus autoridades. Fuimos recibidos con mucha preocupación y respeto.
Dia Nacional de Suecia

JHR: ¿Cuál fue tu primera impresión sobre Suecia?

Gloria. Llegamos en el “midsommar” (la mitad del verano) recuerdo muy bien aquella noche, que pasó de un atardecer a un amanecer con colores indescriptibles. El agua que pude tomar directo de la canilla, aquellos colores en la naturaleza. Estábamos en Moheda, esto era un paraíso.

Además aquel recibimiento que nos hicieron, muy distante a esta situación actual, algo increíble, nos alojaron en unas barracas hermosas, no carecían de nada, una naturaleza deslumbrante con sus lagos y bosques, siempre cercanos. Cómo se preocuparon de nosotros, nuestra salud, dentista.. Tiempo después nos mudamos a Gotemburgo, claro que ya no había más probabilidades de vivienda que en Hjällbo, Hamarkullen. Nuestra primera preocupación fue aprender el idioma.

JHR: Mas o menos ¿Qué fecha llegas a Moheda?
Gloria: En el 76, estuvimos solamente tres meses en el campamento, venían compañeros chilenos, una situación muy grave, por supuesto. Nos trasladaron a Gotemburgo, nos acompaño personal desde allí, nos ayudaron con todos los trámites, escolarización de los entonces niños y adolescentes, compra de muebles y ropa, vivienda para ubicarnos aquí.

La situación de Chile tenía otra trascendencia, dado que se había instaurado una dictadura y derrocado un presidente, un gobierno legalmente constituido.

JHR: Estando viviendo en Hjällbo o Gotemburgo, ¿Lograste conformar alguna organización uruguaya de algún tipo?
Gloria: Recién llegados empezamos a trabajar y estudiar, era lo más importante. Pero
el partido se planteo todo un trabajo de solidaridad en el exterior, no solo con el partido, sino de denuncia del golpe de estado. Así llegó Viera, dirigente del partido y formamos la primera célula aquí. Como me conocía desde Uruguay, me dieron la responsabilidad de finanzas. Entre las necesidades que se plantearon, era la de imprimir y difundir material teórico. La imprenta se abrió a los pocos meses para mandar material al exterior.

Funcionaba en nuestra casa, 4 mimeógrafos, una cortadora y una engrampadora, se imprimió un material, bajo la supervisión de mi ex marido, de alta calidad y contenido. Trabajo muy serio, teniendo claro, que era importante dar a conocer, denunciar en este medio la situación de nuestro país. Seria y documentada. Entre nuestros primeros vínculos, estaba el APK, partido comunista hermano. Después el entonces VPK, la LO, como única central obrera sueca, para la solidaridad con nuestra central.

Otra era la necesidad de una organización, donde recabar finanzas, no solo para nuestro trabajo aquí, sino para la solidaridad en Uruguay, “Föreningen Uruguay”. Reconocida y respetada. A través de ella abrimos y desarrollamos el trabajo con el medio sueco y latino. Con todos los partidos políticos, que quisieran solidarizarse con Uruguay, sin condicionar nuestro trabajo ni compromiso político.

JHR: ¿Cuál es la experiencia que recabaste en estos 35 años de trabajo solidario en este ambiente heterogéneo, como es la parte norte de Gotemburgo?
Gloria: No ha sido fácil. El tiempo decanta los procesos, las personas. Si es la solidaridad con Uruguay, depende: en que proceso, para qué y para quienes. Yo no me plantee nunca esta tarea como caridad. Considero que el gobierno uruguayo tiene importantes deudas pendientes: La anulación de la Ley de Impunidad. La del aborto, y el voto en el exterior. No nos fuimos como “turistas” y también hemos perdido muchas cosas importantes y sufridas el trauma del exilio.

Después he tenido la satisfacción de poder expresarme a través de las radios de cercanía. Muchos años con la Radio Simón Bolívar, 19 de Abril y la página web de la organización Víctor Jara. Nunca he dejado de acompañar, mientras pude, toda actividad solidaria que hubiera.

JHR: ¿Integraste organizaciones de base?
Gloria: No, quizás en una organización de mujeres, en la que estuve muy poco tiempo. Mi vida personal era estudiar y trabajar y realmente no me quedó tiempo para atender otras inquietudes. Integre el grupo de Candombe, que es una expresión muy importante de la cultura de Uruguay. Pero la radio para mi, es un trabajo, tratando de darle un perfil, una línea de información seria, responsable.

JHR: Tienes recuerdos agradables
Gloria: Los hijos son siempre una alegría. El dolor más grande fue dejar Uruguay. De todo trato de hacer un balance, hoy con otra perspectiva. He hecho muchas cosas: Televisión, trabaje con el “Folk Teater”, un monologo sobre mi vida, que fue como un catalizador. He defendido en su momento la casa cultural de “Angered Blå Stället”,.

Allí en su momento había una actividad muy importante, no solo cultural sino también social que era el atelje. Llevada de su mano, conocí a una mujer maravillosa que era la responsable de esa actividad, Karin Ivarsson. Mujer generosa, enormes conocimientos, diferentes técnicas para pintar, imprimir, batik, que lo brindaba a manos llenas y abiertas, de sabiduría y generosidad. Con ella que fue lo que no hice, muñecas Walldorf, hermosas para mi nieta, guantes de fieltro, “Ludvika vantar”.

Pero lo más importante, para mí que nunca tuve niñez, ni pude pintar o jugar, fue que me impulso a pintar en seda. No soy pintora, no. Pero como ella disfrutaba viendo nuestros trabajos, fue un deslumbramiento cuando tuve ante mí, mi primer sjal, lo analizamos juntas y descubrí que en el en sus diferentes formas, colores y zonas, yo había pintado mi vida. Aún hoy al recordarla se me humedecen los ojos.

JHR: ¿Qué opinas respecto a los cambios en Latinoamérica?
Gloria: América Latina va encontrando su camino. El proceso es muy importante pero con diferente carácter, mas definidos en su posición en todo caso antiimperialista o nacionalista.

Venezuela. Otros de posiciones socialdemócratas, reformistas. Argentina, Brasil, Uruguay. Pero el mundo entero exige hoy una política más humana, ante este sistema brutal, craquelado. Queda cada vez más claro su insostenibilidad. No recuerdo si el Che o Fidel ya pronosticaron en todo caso que los grandes cambios los realizara América Latina.

JHR: ¿Qué ha significado para el mundo la caída del muro de Berlín?
Gloria: La caída del Muro de Berlín, es la tragedia más grande que ha sufrido la humanidad. Gorbachov y su Perestroika la traición más grande a los países socialistas y Unión Soviética.
Abrió las puertas de Europa y países del Este a la política Fondo monetarista.

Hoy vemos una Europa militarizada, como el resto del mundo. Acompañando la política belicista, de los grandes lobbys de la guerra de EE.UU. Que cuestan millares de millares de dólares, negados a los pueblos y sus derechos esenciales, creando una desocupación masiva.

El miedo a la misma como forma de sumisión de la clase trabajadora, que ve desaparecer lo que ha costado decenas de años conquistar: Acuerdos colectivos de trabajo, precariedad laboral, recortes inhumanos de la seguridad social. Privatizaciones de todo lo que es rentable, aumento de la edad de jubilación. Seguros privados para lo que antes era público. La salvación de la banca con dineros del estado, en fin la lista es larga.

Países que ayer renegaban del socialismo, hoy cuando han probado la amarga receta neoliberal, quieren volver a él.

JHR: Volviendo al Uruguay: El triunfo del Frente ¿Qué significa para Uruguay?
Gloria: El Frente Amplio, ¿ayer o hoy?, aquel Frente Amplio nunca llego a gobernar y este posterior a la dictadura, tiene muy poco de aquel y mucho, diría, de socialdemócrata.
Claro que depende con lo que relativizamos, con las secuelas de la dictadura, han habido ciertas mejoras y soluciones a problemas endémicos del país.

Para sectores que han vivido en situación de extrema pobreza, algunas mejoras ya son mucho. Pero el gobierno profundiza, con un hombre como Astori, la política neoliberal.

La extranjerización de la tierra en Uruguay es muy importante, de 16 millones de has cultivables más de 4 millones están en manos extranjeras. El 27% de la producción cerealera. Detrás de esto está el Banco Mundial. La privatización y venta de una zona protegida como es el Cabo Polonio, con las focas que tienen allí su zona de reproducción, cuando se habla tanto de medio ambiente, además del desplazamiento de sus pobladores, es un atentado.

Los monocultivos de soya transgénica, con miles de has quemadas para la producción de “biocombustibles” y Monsanto detrás, viejo conocido, para el mundo rico.
El presidente acaba de decir que el país ya esta en condiciones para las inversiones extranjeras, o sea el país se vende por moneditas.

La educación y su reforma, la introducción del Plan Ceibal, que como toda técnica nueva, tiene sus pro y sus contras, por eso el rol del maestro es fundamental.
Estas computadoras, con muy poca capacidad y programas, es el gran negocio de los que hacen los programas y producen las mismas. Invierten en los países en “desarrollo” desde África a Sudamérica en esto, sabiendo que una educación como la nuestra en su momento, sobre todo el laicismo es vital para la formación de ciudadanos capaces de pensar en forma libre.

En fin los temas son muchos, yo no soy experta para darte, seguramente respuesta acertada a todas tus preguntas. Seguramente mis opiniones sean muy controversiales.